
JUEVES 12 DE FEBRERO DE 2009
Son cerca de las dos de la tarde y me aproximo al lugar en el que mi soledad contempla al estado de nerviosismo de mi complices: mis zapatos de fútbol...

Luego de un intenso partido en el que no supimos obtener una ventaja de los "tiempos fuera" y de la capacidad de cada integrante del equipo...podemos enunciar la frase tan lastímera de ¡Adiós regional!
Hoy aún me duele, me duele porque sé la capacidad con la que contamos como un grupo, porque estuve platicando conmigo misma y si bien no hice una lista de propósitos al iniciar el año, uno de mis deseos más fervientes fue asistir al nacional de fútbol rápido de este año...una vez más digo "ni modo", pero la pregunta es: ¿hasta cuándo esas palabras se convertirán en un "a huevo"?

